El aclamado escenógrafo griego, Dimitris Papaioannu, viajará en enero de 2016, a Santiago de Chile para presentar su última obra “Still Life" en el marco del Festival Internacional Santiago a Mil.

Nacido en 1964, Dimitris Papaioannou tiene una trayectoria polifacética en la que ha destacado como director de escena, artista visual y coreógrafo pero también como pintor, ilustrador y dibujante de cómics. Artífice de grandes espectáculos, como la ceremonia de inauguración y cierre de los JJ.OO de Atenas 2004 y de los Primeros Juegos Europeos de Bakú 2015, Papaioannu ha creado más de 40 montajes entre los cuales destacan "Nowhere" (2009), homenaje a la coreógrafa y bailarina alemana Pina Bausch; "Inside" (2011), que consiste en una instalación teatral de seis horas; "Materia Prima" (2012) y "Still Life" (2014). En esta dos últimas aparece él mismo tras diez años de ausencia de los escenarios teatrales.

"Still Life" iniciará una gira internacional que incluye los más importantes teatros del mundo. En concreto, tras su presentación en el Centro de Letras y Artes de Atenas, emprenderá su gira por el Teatro Municipal de Pireo para luego recorrer las ciudades francesas de Bordeaux y París, Milán, Estocolmo y Lisboa hasta llegar al lejano Santiago de Chile, y eso gracias a las constantes y eficientes gestiones de la Embajada de Chile en Grecia y de la Fundación Teatro a Mil.

Desde 1986, cuando crea la compañía de Teatro y Danza Édafos, Papaioannu no deja de sorprendrenos con obras de una belleza austera y una intensidad profunda. Nos ha demostrado que pasa con una facilidad asombrosa de los grandes espectáculos a unos dúos sencillos. Regresando él mismo a los escenarios nos recuerda que no hacen falta muchos ingredientes para crear la magia del arte. En su obra “Still Life” avanza aún más desnudando todos sus componentes. Bajo un enorme cielo, en medio de un escenario desértico, el hombre-trabajador se mide con la gravedad de los materiales principales en su intento de unirse a la levedad del universo al que pertenece. Los cuerpos se equilibran y se fragmentan creando de esta manera ilusiones ópticas las cuales irán iluminando la búsqueda de sentido por el hombre. "Nuestra dimensión material está condenada a agotarse. Nuestros corazones claman por encontrar sentido y eternidad", señala el artista en una entrevista reciente.